Tratamientos Térmicos
Hornos para tratamiento térmico en vacío, atmósfera modificada y aire
Hobersal es líder en la fabricación y exportación de hornos de mufla y tubulares para laboratorios a nivel mundial. Nuestra gama ofrece temperaturas desde 1000ºC hasta 1900ºC, garantizando resultados precisos en diversos procesos de investigación.
Fabricados con materiales de alta resistencia y sometidos a rigurosos controles de calidad, nuestros hornos aseguran un rendimiento óptimo y durabilidad. La innovación y tecnología son el núcleo de nuestra marca, trabajando continuamente en soluciones avanzadas para satisfacer las demandas de la industria.
Un especialista te guiará para una elección perfecta.
Hornos para Tratamientos Térmicos
PR-V Hornos de vacío
PR Series
Horno de mufla hasta 1400ºC, puerta lateral, 4 lados calefactados
Hornos Customizados
HCV CCH Cierre hermético
PR-V Hornos de vacío
HB Series
ATF Series
HCV Series
Horno de mufla hasta 1400ºC, gama industrial, 5 lados calefactados
HD Series
Horno de mufla hasta 1200ºC, puerta abatible o lateral
Hornos con cajas de gas protector
Cajas de acero refractario para trabajos en atmósfera modificada y nitruración
Conoce nuestra historia y equipo.
Los hornos se utilizan principalmente para realizar diversos tratamientos térmicos en materiales metálicos y cerámicos. Algunos de los tratamientos térmicos más comunes que se pueden llevar a cabo con hornos son:
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Temple: Consiste en calentar el material a una temperatura elevada y luego enfriarlo rápidamente. Esto aumenta la dureza del material.
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Revenido: Después del temple, el material se calienta a una temperatura inferior pero durante más tiempo. Este proceso reduce la dureza pero aumenta la tenacidad y la resistencia al impacto.
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Recocido: Se calienta el material a una temperatura alta durante un período de tiempo para eliminar tensiones internas, mejorar la ductilidad y suavizar el material.
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Normalizado: Similar al recocido, pero el enfriamiento se realiza en aire para obtener una estructura más uniforme y reducir la posibilidad de deformaciones.
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Cementación: Consiste en enriquecer la superficie del material con carbono mediante la exposición a altas temperaturas y una atmósfera rica en carbono. Esto mejora la resistencia al desgaste superficial.
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Tratamientos criogénicos: Después de los tratamientos térmicos convencionales, el material se enfría a temperaturas extremadamente bajas (criogénicas) para mejorar aún más sus propiedades mecánicas y la estabilidad dimensional.
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Sinterización: Se utiliza para materiales cerámicos y algunos metales. Consiste en calentar los polvos a una temperatura alta pero inferior a su punto de fusión para unir las partículas y formar un sólido compacto.
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Brasage (soldering): Utilizado para unir metales mediante la fusión de una aleación de baja temperatura que actúa como material de unión.
Estos son solo algunos ejemplos de los tratamientos térmicos que se pueden realizar con hornos, cada uno con aplicaciones específicas según las propiedades deseadas para el material en cuestión.